Ser estudiante en línea

¿Qué es ser un estudiante en línea?



Estudiar en línea requiere que la persona conozca la verdadera definición de aprender. El simple hecho de grabarse a la perfección lo que marca un libro no sirve de mucho si no se puede enfocar ese conocimiento a tu forma de vida. Un estudiante en línea debe buscar las herramientas que faciliten su propio aprendizaje, teniendo al maestro como un asesor que lo apoyara a conseguirlo.

El hecho de cursar la universidad en línea no debe de ser sinónimo de “no hacer nada” o de “solo leer lo que nos es enviado”, sino todo lo contrario. La persona que aprende de este modo debe adaptarse a ciertas características que pide esta modalidad, ajustando su modo de estudio a los retos que tiene y modificando sus tiempos a modo de que pueda exprimir todo lo que este medio pueda ofrecerle.
El estudio en línea se destaca por ser proactivo, la persona decide por su propia cuenta como estudiar, en que tiempos y de qué forma, tomando la responsabilidad de generar un tiempo para sus estudios y adecuándolo a su estilo de vida junto con sus demás compromisos (trabajo, familia e incluso algún tipo diferente de estudios como talleres, etc.). Debe conocer cuáles son sus debilidades y sus fortalezas, aprovechando cada una de ellas para crear estrategias que faciliten su propio estudio, aprendiendo a trabajar de manera cooperativa con su comunidad, enriqueciendo su conocimiento con el de sus compañeros de manera que la experiencia sea más provechosa para su crecimiento profesional. También es importante destacar que el estudiante en línea es responsable de marcar sus propios límites y metas, decidiendo que tan lejos quiere llegar y con cuanta facilidad desea hacerlo, a diferencia de la modalidad escolarizada, no hay profesor que marque límites concretos. El estudiante es completamente responsable de su medio de estudio, está obligado a mejorar o cambiar dichos métodos, lo que sea necesario para aprovechar al máximo lo que pueda ofrecerle su carrera profesional.

Es necesario que la persona tenga un buen manejo de sus emociones, conociendo sus reacciones para poder marcar un límite en estas, mostrándose empático con sus compañeros y analizando las experiencias que ellos le brindan como una nueva forma de adquirir conocimiento, respetando sus ideas para que las propias puedan ser tratadas de la misma forma. El hecho de no tener una comunicación presencial no quiere decir que este modo de estudio no esté conectado o enfocado a una sociedad. Los componentes a los que el estudiante estará expuesto lo ayudarán a su habilidad para tomar decisiones, solucionar problemas, organizar y gestionar información. Es indispensable que le estudiante aprenda a aprender.

Es importante destacar varias veces que el estudiante es el capitán de su propio estudio, ya que esta forma de aprendizaje gira alrededor de él y por lo tanto de cuantas ganas tiene de aprender. El tiene que administrar el tiempo, nadie que no sea él controlará sus tiempos ni le dirá cuanto tiempo debe dedicar a cada ejercicio o a cada lectura, nadie le dirá que hacer o cómo hacerlo. Tendrá que ser crítico en la información que recibe, recordando que no todo lo que hay en la red es verdadero, todo esto con el único propósito de enriquecer o generar nuevos conocimientos. No debe solo memorizar el concepto que se investiga, debe comprenderlo y compartirlo con su entorno, de modo que pueda ser bien aprovechado por todos. Debe tener destreza para escribir, no solo una buena ortografía, que es indispensable para poder darse a entender en un medio que es mayormente escrito. Debe tener un léxico bastante amplio a manera de que el expresarse no represente ningún problema, a diferencia del modelo escolarizado, compartir la información y debatirla, sin competir por quién tiene la verdad absoluta, fortalece el conocimiento ya adquirido.

En este modelo de aprendizaje el profesor solo apoya la curiosidad del estudiante, más que ser un guía en el estudio, es un moderador que ayuda al estudiante a saber qué es exactamente lo que se le dificulta en el estudio, haciéndolo tomar la responsabilidad de solucionarlo por su propia cuenta, guiándolo a mantener una relación basada en el respeto y haciendo que su comunidad de estudiantes comprenda que la comunicación en línea es muy diferente de la real, ya que el sarcasmo, las bromas, etc. no son bien relacionadas en algunos casos, el mensaje queda completamente a entendimiento del receptor, sin que el transmisor pueda hacer aclararlo de manera inmediata en caso de que se genere algún malentendido.

Es importante romper con los mitos del estudio en línea. No solo es estar frente a una computadora, sin leer y sin revisar lo que nos es mandado, se debe tener un amplio criterio y mucha curiosidad. No es fácil entrar y no es fácil salir, ante todo, son instituciones educativas y como tal, llevan todos los procesos necesarios para poder estar dentro de ellas.


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